El día 16 de octubre de 2024, fue un gran día para la
astronomía, ya que un grupo internacional de científicos, cuyo líder es José
Cernichero y que pertenece al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), fueron capaces de hallar dos de las moléculas más grandes que se han
percibido en el espacio interestelar. [1] Este artículo fue publicado en la revista
Astronomy & Astrophysics, mostrando lo difícil que es químicamente el
universo y cómo se crean nuevas moléculas orgánicas en los lugares donde nacen
las nuevas estrellas. [9] Pero nos podemos preguntar, ¿de dónde provienen dichas
moléculas?
DESCUBRIMIENTO EN LA NUBE MOLECULAR DE TAURO.
El descubrimiento se lleva a cabo en una de las nubes
moleculares frías más cercanas a nuestro sistema solar, siendo esto fundamental
para estudiar la formación de las estrellas. Los mencionados investigadores
identificaron las dos moléculas, que son moléculas orgánicas cianadas, es
decir, que contienen grupos cianuro en su estructura, derivados del
hidrocarburo policíclico aromático (PAH) y acenaftileno (C12H8).
Sabiendo esto podemos preguntarnos,
¿Qué son los PAH?
Un hidrocarburo aromático policíclico (PAH) es un compuesto
orgánico que se compone de anillos aromáticos simples que se han unido, y no
contiene heteroátomos ni lleva sustituyentes.
Dichas moléculas son muy interesantes en la química interestelar
porque se cree que son abundantes en el espacio y pueden desempeñar un papel
crucial en la formación de la materia orgánica, un precursor de la vida. [2]
Imagen 1. Ejemplos de algunos PAH [3]
¿Cómo se forman?
Estas moléculas están formadas principalmente por carbono y
se originan por la acumulación de hidrocarburos más pequeños, a partir de
anillos de carbono fusionando de cinco a seis átomos.
Moléculas semejantes encontramos en la Tierra en
combustibles fósiles (petróleo, carbón) como en los productos de su combustión.
El avance cuenta con el apoyo de cálculos de química
cuántica, síntesis química en laboratorios y estudios espectroscópicos, dando
la precisión necesaria para los descubrimientos moleculares estudiados. [4]
IMPORTANCIA DE LOS PAHs.
Se encuentran alrededor de estrellas jóvenes y su
importancia vienen dada porque permiten el almacenamiento de energía pudiendo
liberarla en forma de luz. Esta propiedad los hace característicos para
entender la composición del espacio y los procesos que ocurren en él.
Los PAHs ayudan a la formación de otras moléculas,
incluyendo hidrógeno. Cuando en el espacio interactúan con hidrógeno, pueden
sufrir cambios que dan nuevas formas químicas. Dichos cambios son cruciales
para la formación de moléculas de hidrógeno, que son esenciales para el
desarrollo de estrellas y otros cuerpos celestes.
IMPLICACIONES DEL DESCUBRIMIENTO DE LOS PAHs MÁS GRANDES.
El reciente hallazgo de la mano del CSIC tiene un papel
crucial para la formación de estructuras aun más complejas que puedan dar
origen a la vida, abriendo nuevos caminos para entender cómo se desarrollan
compuestos químicos más complejos en entornos interestelares.
Esto nos lleva a pensar que en el espacio no solo hay lugar
para moléculas simples.
¿CÓMO SE REALIZÓ EL DESCUBRIMIENTO?
Se llevó a cabo utilizando el radiotelescopio de 40 metros
del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en el Observatorio de Yebes, en
Guadalajara. Al analizar el espectro de rotación de estas moléculas, los
científicos pudieron identificarlas sin duda alguna, siendo esto un gran avance
para el estudio de la química molecular en el espacio, ya que las técnicas
usadas anteriormente dependían de otros métodos estadísticos con menos
precisión. [5]
Vídeo 1. Centro astronómico de Yebes.[6]
El descubrimiento forma parte del proyecto Quijote, ¿en qué consiste?
Es una iniciativa con el objetivo de explorar la dificultad química en las
nubes interestelares frías. En los últimos cuatro años, se ha logrado la detención
de más de 90 especies moleculares en el espacio, destacándose entre ellas una
gran cantidad de hidrocarburos puros con una abundancia muy alta. [7]
Imagen 2. Representación artística de las moléculas halladas en el espacio [8]
CONCLUSIÓN.
Este descubrimiento es un ejemplo del avance imparable de la
ciencia hacia una explicación más profunda de los fenómenos cósmicos. La detención
de estas moléculas en la nube TMC-1 no solo amplía nuestro conocimiento sobre
la química del espacio, sino que también nos lleva a pensar sobre la
posibilidad de vida en otros lugares del Universo. Si en las nubes frías donde
nacen las estrellas se forman moléculas tan complejas, no podemos dejar de
preguntarnos: ¿qué otros secretos guardan el Universo y las estrellas? Este
tipo de descubrimientos nos recuerda lo poco que aún sabemos sobre el Universo
y lo mucho que queda por explorar.
REFERENCIAS.
[1] "Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC): https://www.csic.es (Fecha de acceso: 01/12/2024)".
No hay comentarios:
Publicar un comentario